Es momento de comenzar. Ya sabés todo lo necesario para dar tus primeros pasos en e-commerce.
1. La idea
La idea es la esencia para poder arrancar. Es el primer paso a seguir. Es momento de abrir la mente y convertirte en un emprendedor. Utiliza técnicas que te lleven más allá. Analizar negocios que podrían aplicar en internet, busca ideas por la calle y observar comportamientos de los consumidores, te va a ampliar el panorama. Utilizar técnicas como brainstorming (lluvia de ideas), observar publicidades con detenimiento y analizar estrategias de marketing, van a ser las mejores herramientas para poder comenzar.
Pero lo más importante es que te metas una idea en la cabeza: no vendas productos, resuelve problemas.
2. Análisis de la idea
El segundo paso consiste en “pulir” las ideas iniciales hasta quedarte con una sola o unas pocas.
Esta idea de e-commerce será la que analicemos:
- Propuesta de valor: ¿qué valor aporta? ¿Qué necesidad satisface?
- Mercado: ¿es un producto nuevo o es un producto que ya existe pero con nuevas funcionalidades?
- Competencia: Es muy importante saber quién es la competencia y qué puedo hacer para diferenciarme.
- Demanda: Analizar cuánta demanda hay del producto o servicio que busco ofrecer. Analizar palabras claves para saber que tanto buscan los consumidores nuestros producto.
- Dificultades: lista otro retos que te surgirán (dificultades técnicas, competencia, amenazas…).
Finalmente, es importante realizar una análisis FODA ( Fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas).
3. Estrategia
Cada vez son más las empresas que se registran año a año. Pero no todas poseen una buenas estrategia para tener éxito. De hecho, muchas ni siquiera poseen una, por lo que dificulta el pleno rendimiento de la plataforma e-commerce.
Puedes hacerte preguntas como:
- ¿Cómo llegar a nuestros clientes?
- ¿Cómo diferenciarnos de la competencia?
- ¿Vamos a ser más baratos o más caros?
- Perfil de clientes
- Objetivos a corto y largo plazo
- Presupuesto
4. Plan de acción
Sólo queda poner todo en marcha:
- Nombre: Recomendamos que sea corto, fácil de pronunciar y que esté disponible el dominio .com y redes sociales.
- Alojamiento: Mínimamente, un negocio de comercio electrónico necesita un servidor donde alojarse.
- Identidad corporativa: Colores, logo, valores a transmitir, esencia de la marca.
- Sitio web: ¿quién construirá la web? Si no lo vas a hacer tú necesitarás a alguien que lo haga o te asesore.
- Visibilidad: Llegar a los clientes e, en ocasiones, más importante que una web bien diseñada. ¿Cómo hago para que los clientes me vean, me encuentren y me elijan?
No olvidar las cuestiones legales.
Ya tenes todo listo para dar tus primeros pasos en e-commerce. Es hora de vender online